El Atleti cosechó un empate ante el Valencia en el Calderón, combate nulo que deja todo como estaba y una vez más al Atleti le falta dar el golpe en la mesa.
Día frío y lluvioso, no paró de caer agua durante todo el encuentro, y el partidazo se diluyó con la lluvia quedando en empate a uno.
Una mitad para cada equipo, máxima igualdad, la primera fue clara para el Valencia, que perdonó y la segunda para los arreones del Atleti que le pudieron dar la victoria.
Al final ni una cosa ni la otra, combate nulo, el Valencia con muchas bajas fue en muchos momentos superior a un Atleti, que no supo mandar y aprovechar la oportunidad que tenía para ponerse segundo en Liga. Ante los grandes al Atleti le está faltando el plantarse en el campo sin complejos y decir aquí estoy yo.
En el minuto 5 marcaba Jonas para el Valencia, se presagiaba, y es que la defensa rojiblanca salió dormida, y dando muchas facilidades a la delantera ché. Afortunadamente la reacción fue inmediata, Arda Turan ponía un balón dentro del área que Falcao remataría al fondo de la portería de Alves. Esos fueron los dos únicos goles del partido, sin mucha brillantez, y más si cabe cuando se tuvo que retirar en la primera parte Arda, por un esguince de tobillo en un encontronazo con Pereira. Ahí se le acabó la única posibilidad de creación al Atleti. No se entiende como Simeone dejó en la grada a Oliver Torres, el único futbolista que se puede comparar a Turan en cuánto a calidad, sin el turco el Atleti se encomendaba a balones arriba para que los peleara Falcao y Diego Costa o a alguna jugada a balón parado.
En la segunda parte el Valencia se vino abajo, y el Atleti ganó más presencia en ataque, aunque sin trenzar buenas jugadas, tuvo unas cuántas para marcar, pero no tuvo acierto de cara a puerta, como tampoco tuvo su noche el árbitro, que perjudicó claramente al equipo local, dejando sin pitar un claro penalti por mano de Jonas en su propia área.
El Atleti deja escapar un clara ocasión de poner más tierra de por medio a sus perseguidores e incluso meterse segundo, pero lo que deja peor sabor de boca es la imagen de un equipo que no acaba de creérselo y que por momentos parece no tener un plan de juego al que agarrarse, confía demasiado en sus delanteros y en que surjan jugadas aisladas que entren en la portería rival, demasiada confianza que a veces no sale bien. El Atleti debe encontrar algo más en lo que agarrarse, Simeone debe arriesgar y probar algún plan B. Ante el Valencia un solo cambio y obligado por la lesión de Arda, en una semana cargada de partidos para sus internacionales, al equipo le faltaba el ritmo de otras ocasiones, tal vez fue la frescura lo que mermó al equipo.
Próximo partido en Getafe, hay que hacer bueno este empate con una victoria. Simeone tiene una semana por delante para recuperar a sus jugadores y afrontar el partido con garantías para volver a ganar fuera de casa.