El Atleti en su visita a Valladolid, se llevó una cómoda victoria por 0 a 3 y lo que es más importante la sensación de volver a ganar fuera de casa.
Ya habíamos comentado lo importante que era para el Atleti, este partido por jugarse fuera de casa y lo que eso significaba. Ocho partidos sin conocer la victoria a domicilio eran demasiados, y esto tenía que llegar a su fin de una vez por todas.
Finalmente se cumplió el objetivo, y se hizo a lo grande con un contundente 0-3 obra de Falcao, Diego Costa y el Cebolla Rodríguez. Pero lo realmente importante fue la actitud recuperada, la Fe en buscar la victoria y conseguirla.
El Atleti salió con todo y a por todas, es cierto que el juego no fue del todo brillante, pero con Gabi y Diego Costa en el once, volvió la presión, que es el éxito de este equipo, apabullar al rival hasta meterlo en su área. A base de presión el Valladolid retrocedió hasta su campo, sin apenas inquietar a Courtois en todo el encuentro.
Con la pareja Godín-Miranda, el equipo es sólido atrás, y con Falcao y Diego Costa arriba, la presión comienza desde el ataque. Pareja perfecta la dupla de delanteros del Atleti, ambos marcaron, y ambos saben cual es su misión dentro del campo. Una vez más destacar la labor de Diego Costa, mucho más sacrificado que Falcao en su papel en el césped, lucha, presiona, crea peligro, provoca tarjetas y encima marca, la verdad que es el jugador más en forma en estos momentos del Atleti, y Falcao que sin estar del todo bien, siempre aparece, siempre tiene su momento, el que le da el olfato de rematador, que le coloca dónde tiene que estar un delantero.
No fue un partido bonito, pero si de mucha efectividad por parte de los de Simeone que hicieron lo que tenían encomendado, que era volver a ganar, fuera de casa que ya tocaba, y esperemos que esto vuelva a ser rutina.
Ahora toca seguir luchando, y remar fuerte en Rusia para levantar una eliminatoria que está muy cuesta arriba. Lo importante es que el equipo recupere su imagen de bloque ganador que se entrega en cada partido, eso es lo que quiere Simeone y lo que desea la afición.